Como ya sabréis los que sois asiduos de este blog, el año pasado la aventura de correr en esta carrera empezó en una típica charla en la barra de un bar que acabó con un tajante "¡no hay huev...!", y acabamos participando en una carrera que resultó una de las experiencias más gratificantes que he tenido montado en una moto.
Este año ya teníamos el trabajo medio hecho, nuestra veterana Suzuki GSX 600 F '89 que tan bien se portó el año pasado seguía ahí esperándonos, al igual que si tuvieras un perro de mascota y éste te esperara a que volvieras a casa sentado en la puerta moviendo el rabo. Pero necesitaba de algunos mimos y este año el aporte económico por parte de nuestros generosos patrocinadores había menguado en dinero, y los que más nos aportaban ayuda en especie. El año pasado la Katana acabó la carrera perdiendo algo de aceite, y pudimos comprobar en la pista que sufríamos una importante desventaja en potencia y prestaciones con respecto a las CBR y FZR que pilotaban a mayoría de adversarios, incluso la otra GSX participante, la del Team Belgiam Moto Club, tenía más aceleración que nuestra moto. Así pues nuestra prioridad para la carrera era no potenciar la moto, sino conseguir una buena puesta a punto que nos permitiera recuperar algún cv perdido de los que tendría que darnos el motor en perfecto estado. Entre nuestro mecánico de confianza en CARRI SPORT MOTOS, de Armilla (GR) y las manos de Pedro Sanchez-Morate, Antonio Pareja y Mario Aguilar a ratos sueltos después del trabajo se fueron subsanando los diferentes problemas y puesta a punto que necesitaba la moto. La fuga de aceite se subsanó, por suerte sólo cuestión de cambiar una junta tórica, procedimos a mirar estado de bujías y nos dio por mirar la compresión en los cilindros llevándonos una desagradable sorpresa, ya que de los cuatro cilindros sólo uno presentaba buenos valores de compresión, teniendo dos con valores muy bajos cerca del límite aceptable marcado por fábrica, y para más inri resulta que tenemos el embrague en las últimas y habría que cambiarlo, total que con más sapiencia que medios y con la inestimable ayuda de nuestro mecánico optamos sólo por poner nuevo el embrague, cambiar el aceite del motor aditivándolo con Metalube y realizando un reglaje de válvulas y carburación. También cabe destacar que cambiamos nuestro escape por alto por un nuevo silencioso ubicado en una posición más tradicional abajo por el lado derecho de la moto, lo cual si nos llevó a conseguir una sensible mejora en prestaciones. En el resto de la moto todo igual, amortiguador de serie y horquilla también, pero precargada con casquillos y aceite más denso.
Después de una jornada de entrenamientos un mes antes de la carrera, donde a pesar de fallarnos continuamente la moto con un desagradable rateo en todo el rango de revoluciones del motor conseguimos rodar en tiempos iguales a los de carrera del pasado año, nos presentamos el pasado día 27 de mayo en las puertas del circuito de Guadix dispuestos a repetir tan excitante experiencia circuitera. Buscar box, acomodarnos, bajar la moto del carrillo y ponerla sobre los caballetes, saludar a todo el mundo y soltar nervios, muchos nervios otra vez. Como desde que acabamos la pasada carrera no he vuelto a coger la Katana, salgo yo primero en el entrenamiento libre para cogerle el aire de nuevo a la moto, sin prisas, poco a poco, bueno, no tan poco, hay que memorizarse de nuevo el circuito, probar las trazadas que llevamos un año hablando como hacerlas y ponerlas en práctica, y sobre todo, estrujar algo la moto para comprobar que todo está en su sitio, y parece que si, la moto responde más y mejor que como la recordaba del año pasado. Lo único que noté era que me costaba tirarla al lado derecho, así que paré en box pensando como así fue que la rueda trasera estaría desalineada con respecto a la delantera. Luego mi hermano también salió y paró de nuevo en box diciendo que la moto se paraba y ahogaba, ¡Alarma!, por fortuna fue una tontería, nuestro nuevo tapón de gasolina de cierre rápido no permitía la salida de gases por el depósito, así que le quitamos el anillo de goma que llevaba y todo listo. Para el entreno cronometrado ponemos a Antonio en pista, ahora tiene el honor de ser el más rápido de los tres, y después de la carrera seguirá ostentando ese honor. A la segunda vuelta cronometrada se marca un tiempo de 1:34:960,....¡5 segundos menos que nuestro mejor tiempo en carrera del año pasado!, mi título honorífico de piloto más rápido del Team Hobby me ha sido arrebatado de forma fulminante.
...salgo yo primero al entrenamiento libre para cogerle el aire de nuevo a la moto...
Ya estamos preparados para la carrera, nuestra larga espera ha terminado y afrontamos de nuevo con renovada ilusión la II Batalla de Clásicas, esta vez mejor situados que el año pasado, ya que gracias a los tiempos de Antonio salimos desde la 6ª posición en parrilla, y nuestro objetivo en carrera, la GSX del Team Belgian Motor Club partirá por detrás nuestra. El año pasado finalmente quedaron por delante nuestro sacándonos dos vueltas de ventaja, este año nuestro objetivo es quedar por delante de ellos y por más de dos vueltas si puede ser.
La suerte está hechada....
Demasiado bueno
ResponderEliminarMe encantan vuestras aventuras. Felicidades! y a seguir..
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